No Pierdas el Control de tu Vida, a Causa de tus Emociones

¿Les ha pasado que sobreactúan por cosas simple? ¿Qué rompen en llanto y ni siquiera saben porque? ¿Qué sienten enojo casi todo el tiempo? Se trata de nuestra psiquis que intenta decirnos algo, son nuestras emociones a punto de explotar.

Somos seres emocionales y por tanto es normal manifestar emociones, el problema surge cuando esas emociones toman el control de nuestra vida.




Las emociones son un conjunto de reacciones subjetivas, que presentamos frente a una determinada situación. Estas reacciones generan una respuesta fisiológica y conductual. 
Las emociones cumplen una función fundamental en nuestro desarrollo psíquico y social. Nos permiten avanzar sobre una determinada situación, y dar una respuesta acorde a los estímulos vivenciados. Estas respuestas a su vez, nos brindan mucha información. Se trata de señales que nos indican tanto a nosotros mismos como a los demás, en que condición nos encontramos, por ejemplo si estamos alegres o tristes.

Por otro lado, cuando nos vemos superados por una determinada situación, y nuestra respuesta emocional es desmedida, podemos desencadenar un volcán emocional.
Dicho volcán puede erupcionar ante cualquier estimulo, y caemos en un  estado de tensión constante, donde todo representa un riesgo un peligro inminente. Básicamente nuestras emociones toman el control, y sobre reaccionamos ante cualquier situación.
Esto trae consigo una inconformidad con nosotros mismos, y también una mala relación con los demás. Cuando las emociones toman el control, vivimos a la defensiva, nos sentimos abrumados, y cada situación nos parece un ataque directo hacia nosotros, y simplemente sobre reaccionamos.

¿Cómo controlar nuestras emociones?

Si bien las emociones son una manifestación básica para cada individuo, podemos regularlas para alcanzar un sano desarrollo. 

El primer paso es identificar nuestras emociones. Cada emoción es importante, pero su manifestación no puede ser descontrolada.
¿Cómo identifico una emoción perjudicial?
Simple, cuando una emoción es desbordante y nos impide razonar, entonces se trata de una emoción perjudicial.

Cuando logramos identificar, cual de nuestras emociones nos ocasiona un desequilibrio emocional, el paso a seguir es analizar nuestro interior y cuestionarnos ¿Qué elementos detonan esa emoción?, ¿Por qué esos elementos nos importan tanto?. Es necesario buscar la raíz del problema y plantear una posible solución.

El tercer y último paso, es tomar conciencia de esos elementos detonantes. Al ser conscientes de cuales son aquellas situaciones que nos hacen perder el control de nuestras emociones, podemos anticiparnos a ellas, y encarar la situación con otra postura, evitando así nuestro volcán emocional.

Hasta el próximo viaje... 







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