Vivir con Baja Autoestima - Consecuencias

¿Qué es la autoestima?

Cuando hablamos de autoestima, nos referimos a una autovaloración. Es decir, que sentimos y que pensamos acerca de nosotros mismos ¿Nos queremos? ¿Nos aceptamos? ¿Nos respetamos?

Una sana autoestima implica un sentimiento de aceptación hacia la persona que somos, y una confianza en nuestra capacidad de acción. Lo que nos permite crecer y desarrollarnos tanto a nivel personal como profesional.

Por el contrario una Baja Autoestima, indica una valoración negativa de nosotros mismos, que deriva en sentimientos de inconformidad e incapacidad. Básicamente estamos desconformes con quienes somos, y dudamos de todo lo que hacemos.

Vivir con baja autoestima

Poseer una autoestima baja, es como tener un pequeño diablito sobre uno de tus hombros, susurrándote cosas negativas al oído. Nos repite constantemente que no valemos nada, que no somos capases, que no vamos a lograr nada, que los demás son mejores que nosotros. Y cuando pasamos mucho tiempo escuchando esa vocecita, comenzamos a creerle. 

Esta opinión negativa de nosotros mismos nos lleva por una espiral descendente:

• Al dudar de nuestra capacidad, al creer que haremos las cosas mal, simplemente dejamos de actuar, de hacer, de crear, dejamos de intentarlo. 
• Al sentir que no valemos nada, comenzamos a odiarnos, a odiar nuestra vida, a odiar nuestro entorno.
• Al pensar que los demás son mejores que nosotros, nos sentimos pequeños, expuestos, prescindibles. 
• Al creer que no vamos a lograr nada, sentimos que la vida no importa, que nuestra vida no importa, que vivir no tiene sentido.

En realidad, solo se trata de nosotros, de nuestros miedos, de nuestras dudas... Pueden ser temores creados por nosotros o derivados de nuestro entorno, pero son nuestros temores y son temores sin fundamento. Nada de eso es real.

Desarrollar una sana autoestima  

Creer en uno mismo, no es fácil, y no se logra de la noche a la mañana, pero debemos iniciar el cambio en algún momento. Es normal sentir miedo, miedo a equivocarnos, miedo a fallar. Pero esos miedos no deben controlarnos.

Querernos, aceptarnos, respetarnos es todo un proceso, y el primer paso es conocernos.

Busca en tu interior quien eres realmente, que cosas te gustan, que cosas odias, que te hace diferente, especial. Busca en tu interior a esa persona que eres, o a la persona que quieres ser, y avanza hacia ella. 

El temor y la duda siempre serán parte de nuestra vida, pero no serán la parte mas importante. 

El segundo paso es pedir ayuda. El peso del mundo se siente mas livianos cuando se comparte. No es necesario que sea ayuda profesional, simplemente tener a alguien que nos escuche marcara la diferencia.

El siguiente punto es enfrentar nuestros miedos. El proceso es simple, solo debemos actuar, aunque fallemos, aprender de lo que hicimos mal y volver a intentarlo.

Y lo mas importante, busca algo que te haga feliz. No importa lo que sea, un trabajo, un pasatiempo, un objeto, una persona... Busca algo que te haga sonreír, de solo pensar en ello.

Se que todo esto no es una solución, solo es un paso en la dirección correcta.

Hasta el próximo viaje...

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