Asegurador de riesgo

El Asegurador de riesgo, es un juego para aliviar la preocupación. Este nos permite medir el nivel de riesgo real de las situaciones que enfrentamos día a día.   

Este puede ser un modo divertido de ver la realidad desde otra perspectiva. ¡Vamos a colocarnos en los zapatos de un asegurador de riesgo! 

Sabemos que la realidad es una sola, pero el modo de interpretarla es infinito. Ante una determinada situación todos podemos analizarla y sacar conclusiones propias, basadas en nuestras ideas y creencias.

 

El asegurador de riesgo nos permite poner en la balanza que cosas son importantes y cuales no, qué cosas son un verdadero problema y cuáles no. 

En la actualidad vivir estresados es algo habitual, y muchas veces ese nivel acelerado de vida nos hace perder el foco de nuestra realidad, y surgen nuevos desafíos, cosas que no eran importantes ahora lo son, y cosas que antes parecían simples ahora son complejas. 

En esos momentos de la vida en que todo nos parece un problema, cuando nos molesta hasta el más mínimo detalle, es necesario detenernos un minuto y analizarnos a nosotros y a nuestra vida, y ver si no hemos perdido nuestro camino en algún punto del recorrido.  

¿Cómo funciona?

Es fácil, imagina que tu trabajo es determinar cuál es el nivel de riesgo, de ciertas actividades o hechos. 

El nivel de riesgo será en base a el grado de daño que esa actividad puede ocasionar, teniendo en cuenta el daño mental, emocional y físico. 

El nivel de riesgo será asignado con números del 1 al 10, tomando el nivel 1 como riesgo mínimo y el nivel 10 como riesgo máximo.  

¡A trabajar! 

✅ Hagamos un pequeño ejercicio, para entrar en calor 😊 

Tenemos 3 actividades recreativas: ciclismo, caminata y paracaidismo  

¿Qué nivel de riesgo le asignaría del 1 al 10? Ten en cuenta el grado de daño que esa actividad podría ocasionar a quien la practique. 

Seguramente obtengas una respuesta similar a ésta:

Ya que es poco probable que nos suceda algo por caminar, con ciclismo podríamos caernos de la bici, pero el daño sería mínimo, y paracaidismo es un deporte de riesgo en sí, pero también representa un desafío emocional. 

✅ Como vez este sistema es simple, ahora vamos a realizarlo con situaciones hipotéticas de la vida: mudarse, derramar una taza de café, chocar tu auto. 

Todas estas cosas representan un problema, pero no tienen el mismo nivel de riesgo, ya que no provocan el mismo grado de daño. 

Cuestiónate:

 

• Que daño físico provoca, ¿qué grado es? 
• Que daño emocional produce, ¿qué grado es? 
• Que daño mental ocasiona, ¿qué grado es? 
• A partir de allí, asignó un nivel de riesgo para cada situación 

 

✅ Con este simple juego puedes dar un paso atrás y poner sobre papel, que tan importantes son las cosas en realidad. 

¿Son un verdadero problema? ¿Es un problema tan grave? 

✔ Ahora aplica este proceso a situaciones reales de tu vida, coloca todas aquellas cosas que en este momento te generen un malestar físico o emocional y asígnales un nivel de riesgo. 

Recuerda que eres un asegurador de riesgo y tu trabajo es evaluar cada situación, da un paso atrás y analizar de modo objetivo tu realidad.

Al analizarlo vemos que muchas veces les damos importancia a cosas que no merecían tanta atención.  Veras que a veces te haces problema por cosas que no son tan graves, por cosas que no representan un riesgo real, por cosas que en realidad no nos dañan.

Puedes utilizar este método, cada vez que sientas que la situación te supera, o cada vez que necesites poner las cosas en perspectiva.

Recuerda: 

Aunque a veces nos puede parecer lo contrario, ¡no todo es un problema!