Emigrar, miedos e impacto cultural

¿Qué es emigrar?

Emigrar es el acto de ir a vivir a un lugar diferente. Se trata de dejar nuestro lugar de origen y establecernos en un lugar diferente. Esto puede darse generalmente por razones económicas, pero puede ser motivadas por diversas cuestiones, como migrar por estudios, por turismo o exploraciones, por razones amorosas, etc.

Pero emigrar es una decisión, puede representar una solución, un escape, una aventura o un simple cambio, pero siempre será una importante decisión. 

Image by Lorri Lang from Pixabay

Miedos de emigrar

Aun cuando represente una oportunidad, emigrar implica salir de nuestra zona de confort y eso puede ser aterrador. 

El miedo al cambio suele ser el mayor desafío, el no saber que vamos a encontrar, el miedo a dejar atrás lo que hasta ese momento fue nuestra vida, dejar nuestra familia, nuestros amigos…  

¿Qué estoy buscando?

Poner en la balanza lo que dejamos atrás vs lo que vamos a encontrar, es un ejercicio necesario.  Es fundamental saber que es más importante, debemos identificar lo que estamos buscando, saber qué es lo que necesitamos para tener una vida mejor o para cumplir algún objetivo específico. 

¿Qué necesito para comenzar esta nueva vida? ¿Cuáles son los riesgos?

Conocer los riesgos es un punto decisivo a la hora de emigrar, es necesario informarse todo lo que sea posible, antes de dejar nuestro punto de origen. En necesario conocer las cuestiones legales básicas, que tipo de documentación requerimos, que podemos hacer y que no, que voy a necesitar para vivir en ese lugar, que voy a encontrar allí, con que alternativas cuento en caso de que algo salga mal, ¿tengo un plan de respaldo? ¿Puedo regresar a mi lugar de origen? ¿Cuento con los medios económicos para vivir dignamente, o con las habilidades para trabajar y costear mi estilo de vida? 

 

Prepararse para un impacto cultural

Pero finalmente cuando esa decisión se ha convertido en una realidad, cuando finalmente dimos un salto de fe y emigrados a lo que creemos es un lugar mejor, nos topamos con otro desafío, nos topamos con una nueva realidad, y con esto viene un choque cultural.  

Cuando lo que encontramos difiere mucho de lo que esperábamos, o de lo que habíamos imaginado, puede provocar un desequilibrio emocional. 

Generalmente, la opinión que tenemos de un lugar que no conocemos, suele estar influenciada por opiniones externas, por los medios de comunicación, por lo que se muestra en redes sociales, y por preconceptos que no formamos a partir de esa información que recibimos, pero la mayoría de las veces ese lugar resulta ser diferente a lo que creíamos.  

Ser diferente no quiere decir que sea malo, solo que no es lo que estábamos esperando. Y cuando esto sucede, suele ser difícil, ya que nos cuesta aceptar eso que no esperábamos.

El impacto se puede dar por múltiples factores, desde costumbres diferentes al saludar, otros horarios laborales o de recreación, un trato diferente a los extranjeros, menores posibilidades laborales para el inmigrante, costumbres sociales que no esperábamos, etc.

Migración saludable

Debemos emigrar de forma consiente, con la mente abierta, dispuestos a conocer y probar cosas nuevas, debemos darle a ese nuevo lugar, la posibilidad de sorprendernos.

Debemos emigrar esperando el mejor resultado, pero cuando las cosas no resultan como esperamos, muchas veces no es por culpa del lugar, es simplemente que partimos con una visión poco realista o equivocada del lugar.

Es necesario tener una actitud positiva, especialmente al encontrarnos con costumbres o cosas que nos resultan extrañas, debemos tratar de entenderlas o por lo menos aceptar que así son las cosas en ese lugar.

Es importante mantener, si así lo deseamos nuestra cultura, nuestras propias costumbres, pero nunca debemos trata de imponerlas a los demás. Esta bien si los demás, muestran interés, pero nunca como una imposición.

Es fundamental mantener una mentalidad realista. Mudarnos, cambiar de ciudad, o de país, no hará que las cosas cambien o mejoren como por arte de magia. No podemos exigirle a ese lugar, mas de los que nos puede brindar. El mayor trabajo, el mayor esfuerzo debemos realizarlo nosotros.

El sueño de emigrar

Emigrar puede ser un sueño hecho realidad, nos permite conocer, conocer nuevos lugares, nuevas costumbres, nueva gente. Nos permite comenzar de nuevo, comenzar una nueva vida, redescubrirnos, y encontrarnos a nosotros mismos en ese nuevo lugar.

Pero no olvidemos que emigrar requiere ser consientes y responsables. Es necesario ser conscientes de los desafíos que podemos encontrar, y ser responsables de nuestras decisiones, de nuestras acciones, y de nuestra propia vida.

Emigrar puede ser maravilloso, pero depende en gran parte de nosotros que así sea.

Hasta el próximo viaje...

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