¿Persigues el objetivo correcto? Define tus objetivos

 A veces, alcanzar nuestros objetivos no es el problema, sino saber definir el objetivo correcto. 

¿Realmente sabes cuál es tu objetivo?  ¿Sabes a dónde quieres llegar? ¿Eres consciente de las consecuencias de lograr tu cometido? 




Comencemos por definir qué son los objetivos

 

 Un objetivo es una finalidad, una meta que intentamos alcanzar y hacia la cual dirigimos nuestras acciones y nuestro esfuerzo. Muchos objetivos, también son planteados como desafíos, como medios de superación, con la creencia de que mejorará nuestra vida una vez alcanzados. 



¿Por qué es importante plantear un objetivo correcto? 


Definir un objetivo correcto es fundamental, para evitar perder tiempo y esfuerzo, en algo que realmente no queremos. Perseguir los objetivos incorrectos, nos lleva a frustrarnos una vez que los alcanzamos, porque el resultado obtenido no va a ser el esperado. 



¿Cómo plantear un objetivo correcto? 


✅ Primero define a donde quieres llegar. Cuestiónate lo siguiente: 

  • ¿Qué intentas lograr, una vez alcanzado ese objetivo?  
  • ¿Estás seguro, de que eso es lo que quieres?  
  • ¿Lo haces por ti?  
  • ¿Lo haces por las razones correctas? 



✅ Segundo, analiza tu objetivo 


Alcanzar ese objetivo ¿depende de ti?  


Muchas veces intentamos alcanzar objetivos, cuya realización en realidad no dependen de nosotros. Son objetivos en los cuales nuestras acciones y nuestro esfuerzo, no tienen un efecto significativo para concretar la realización de los mismos. 


Asegúrate de que la consecución de tu objetivo dependa de ti, que sea algo que realmente puedas lograr gracias a tus decisiones, a tu plan de acción y a tu esfuerzo. 

 

¿Es verificable? 


Esto significa que la meta, debe ser clara, es decir, que puedas darte cuenta, si la alcanzas o no. Y además, que se cumpla dentro de un plazo de tiempo determinado. Por ejemplo, si tu objetivo es “mejorar el ambiente”, será difícil saber si tus acciones marcan un efecto como para mejorarlo, o si esa tarea te va a llevar meses o años. 


Pero si marcas un objetivo más preciso y limitado en el tiempo, sería más fácil de verificar. Por ejemplo, fijarte como meta, ir a limpiar una playa todos los fines de semana, durante un año, o reciclar 50 kg de latas de refresco. 



✅ Tercero, analiza el impacto

 

¿Conoces el impacto que tendrá ese objetivo? 


Cuando alcances tu objetivo ¿qué vas a ganar? ¿qué ganarán quienes te rodean? y aún más importante ¿perderás algo al alcanzar tu objetivo? 


Este punto se trata básicamente de plantearnos si el objetivo fijado, realmente vale la pena. A veces, nos concentramos tanto en el objetivo, que no somos conscientes de lo que estamos arriesgando o perdiendo por alcanzarlo, o el impacto que éste tiene en quienes nos rodean.

 

¿Ese objetivo es beneficioso? ¿para quién? 

Debemos saber si al cumplir este objetivo, o al llevar adelante nuestro plan de acción para alcanzarlo, estamos perjudicando a alguien más, o incluso a nosotros mismos. 



✅ Cuarto, analízate a ti mismo 


¿Cuál es tu estado emocional?

 

Tener el estado emocional correcto, es fundamental a la hora de definir tu objetivo. Si tienes un estado emocional negativo, este puede llevarte a elegir un objetivo bajo las razones incorrectas, como miedo o enojo, lo que nos llevará a sentirnos frustrados al alcanzar dicho objetivo, porque éste, en definitiva, será algo que realmente no queremos.  


Por ejemplo, al pelearnos con un compañero de trabajo y tener un estado emocional negativo movido por la ira, puede llevarnos a plantearnos como objetivo, conseguir el mismo puesto que este compañero quería, pero que en realidad a nosotros en un principio no nos interesaba. 


Por otra parte, un estado de confusión puede llevarnos a buscar un objetivo que nos aleje, de aquello que en verdad intentamos alcanzar, o que es importante para nosotros. 


Un estado mental más equilibrado, nos ayudará a tomar decisiones correctas, y a plantear objetivos que efectivamente nos acerquen a lo que en verdad queremos. 



✅ En resumen, es fundamental escoger un objetivo que responda la pregunta ¿A dónde quiero llegar? pero que, además, sea realmente bueno para nosotros y que no impacte negativamente en quienes nos rodean. 



Hasta el próximo viaje...






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Comentarios

  1. Muy cierto lo que dices. Cuando uno tiene sus ánimos muy bajos no sale bien nada, el trabajo, las actividades que realizas como por ejemplo si estás cocinando algo no te sale sabroso.

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