¿Tienes Creencias Irracionales? ¡Descúbrelo! (parte 2)
Como ya vimos en la primer parte, las Creencias Irracionales son el resultado de una interpretación distorsionada de la realidad, que llevan a la persona a generar pensamientos automáticos y negativos, pero sin tener evidencia que los respalden.
Consecuencias de tener creencias irracionales:
- pensamientos ilógicos,
- actuar de modo incorrecto, al partir de una mala construcción de la realidad,
- tener reacciones emocionales impulsivas y desproporcionadas,
- se convierten en un obstáculo, a la hora de alcanzar nuestros objetivos
- consecuencias negativas a nivel personal y profesional.
¿Te identificas con alguna de estas creencias irracionales? Veamos las que siguen.
Magnificación:
Es la tendencia exagerar lo negativo de un rasgo situación. Por ejemplo: "seguro mi amiga me odia por obsequiarle algo simple en su cumpleaños".
En este caso la persona no solo se centra en el aspecto negativo de la situación, sino que saca conclusiones sobre el resultado de la situación en base a su propia creencia.
Continuando con el ejemplo anterior, la persona cree que el objeto que acaba de regalarle a su amiga es simple por lo que no le gustará, y a raíz de eso su amiga va a odiarla. Pero en realidad la persona no sabe con certeza el resultado de esa situación, ya que el obsequio podría gustarle, y aunque no le gustara, eso no implica que su amiga vaya a odiarla, quizá simplemente aprecie el detalle.
Cómo podemos ver el pensamiento irracional es producto de nuestros miedos, de una visión negativa de la realidad. Lo que lleva al individuo a no apreciar la vida y la realidad tal cómo se presenta, ya que siempre está con miedo esperando un desenlace negativo de cada situación.
Afirmaciones con debería:
Son demandas internas sobre las capacidades personales y de otros sin analizar si son razonables en el contexto. Ejemplo "debí saber que la reunión no valía la pena".
Son exigencias imposibles de concretar, ya que el resultado de la situación excede nuestro control. Simplemente no podemos adivinar el futuro.
Este tipo de afirmaciones llevan al individuo a sentirse responsable por eventos o situaciones que escapan de su control, lo que desencadena una inconformidad consigo mismo, sumado a reclamos internos y sentimientos de frustración.
Es necesario darse cuenta de que no somos los responsables de ese resultado, no podemos culparnos por algo que no controlamos.
Abstracción selectiva:
Se refiere a poner una situación entera en un contexto negativo, a partir de un solo hecho o situación negativa, por ejemplo, "tiré el azúcar, hoy será un mal día".
Se trata de una generalización extrema. La persona cree que, al suceder algo negativo, todo lo demás que suceda a posterior también será malo.
Como vemos este tipo de suposiciones, son sumamente ilógicas. Ya que no es posible generalizar a partir de un solo hecho, y mucho menos cuando no hay un vínculo o relación que respalde dicha suposición.
A partir de estos pensamientos, el individuo queda predispuesto a que los hechos o situaciones tengan un resultado negativo, y de alguna manera es la misma persona quien con su comportamiento provoca que las cosas resulten mal, ya que es lo que esperaba de antemano.
Como podemos ver, las creencias irracionales son múltiples y variadas, y todos en algún momento caemos en ellas. Es importante saber identificarlas y a partir de allí, evitarlas.
Hasta aquí la segunda parte de creencias irracionales. Continuaremos en futuras entradas.
Hasta el próximo viaje...
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